El estruendo de los aplausos lo confirmó; el estreno nacional de «Ave María», de Bartolomeo Cosenza, que tuvo lugar el 18 de junio en el Sagrario Metropolitano, fue un total éxito.
La pieza, compuesta en 2014, ha sido tocada en prácticamente todos los países de Europa, pero lo que sucedió el viernes en el Sagrario, interpretada por la Orquesta de Cámara Beethoven y la soprano Carolina Morán, fue su debut en escenarios mexicanos.

Pero este no fue el único estreno en esta noche de música en el Centro Histórico de Guadalajara, ya que también se registró el nacimiento ante público del «Nocturno Elegiaco», poema sinfónico compuesto por José Perales, director del ensamble tapatío apoyado por la Sociedad Musical Giuseppe Verdi.
Fue una noche en la que el pasado y el presente se fundieron en un solo lugar. Tres compositores vivos fueron interpretados, al igual que tres compositores que han trascendido el tiempo con su música.
El primer compositor en aparecer fue el originario de Aguascalientes, Javier González, cuya obra «Pequeño Adagio para Orquesta de Cuerdas A. P. X. » fue el preámbulo de una noche ideal para los melómanos y aquellos que se acercaban por primera vez a un recital de este tipo.
A pesar de que se inició con algunos minutos de retraso por causas de fuerza mayor, los asistentes no mostraron impaciencia y escuchaban atentamente las explicaciones que Perales daba sobre cada una de las piezas.
El segundo compositor en ser interpretado fue Franz Anton Hoffmeister, quien fue contemporáneo de Mozart. Su obra interpretada, en la que participó el primer solista de la noche, el violista principal del ensamble, Bruno Barbosa, fue «Concierto para Viola en Re Mayor», cuya difícil partitura fue solventada por el intérprete.
El primer estreno, en este caso nacional, fue el «Ave María», de Cosenza, el cual, según explicó el director, fue interpretado por Morán a petición del autor, nacido en Palermo.
Esta pieza resaltó por su energía y la forma en la que conectó con los asistentes se notó durante su ejecución y se comprobó en la parte final, con la llegada de una sonora ovación que emocionó a la soprano.
Pero una orquesta que lleva en su nombre el apellido Beethoven no puede irse sin tocar algo de este ilustre compositor alemán, por lo que para esta noche tocó el turno al «Segundo Movimiento andante cantabile con moto», de la Primera Sinfonía.
El siguiente estreno, el «Nocturno Elegiaco», la quinta obra de Perales, fue como explicó el director, una interpretación filosófica de la vida y la muerte, siendo ésta primera como la noche y la segunda como el amanecer. Esto se basa en el pensamiento de San Juan de la Cruz.
El broche de oro de la velada, que incluso se convirtió en el vis del recital, fue el aria «Quel Guardo Il Cavaliere», de la ópera «Don Pasquale», de Donizetti. Morán la interpretó con toda la gracia que su personaje requiere y así terminó por echarse al público a la bolsa.
La siguiente presentación y cierre de temporada de la Orquesta de Cámara Beethoven será el 9 de julio y contará con el apoyo del Coro Formativo San Gregorio Magno y el órgano del Sagrario para interpretar obras de Haendel. La entrada será gratuita.
Un comentario sobre “Estrenos musicales emocionan en el Sagrario Metropolitano”